Explícame lo inexplicable,
enséñame la práctica.
Escúchame con calma dentro de la trampa que construí,
para no aferrarme a ti.
Olvídame, pero recuérdame
en el lugar que profanamos en sigilo,
Cállate pero háblame entre sabanas,
hazlo como la última vez que te vi.
Eres mi vicio y virtud,
principio del caos
que siempre quiero sucumbir.
0 comentarios:
Publicar un comentario