Puedo pensar que todo es en vano,
puedo someter mi cabeza a un tormento,
sigo aqui, rodeada de mis libros,
persiguiendo estrellas fugaces
que se mezclan con el universo.
No queda mas nada que decir,
yo me alejo de lo que eramos,
me fugo de tus brazos,
de tus besos, de tus abrazos,
del apreton fuerte de tus manos.
me alejo sin decir adios.
Despidiendome entre susurros,
entre llantos callados, sin pronunciar
la palabra mas amarga entre los dos.
No se hace falta que la diga,
la conoces tanto como yo.
palabra que se entrelaza
en cuerpos moribundos,
fatigados del cansancio
de lo que significa el amor.